Foto generada por Inteligencia Artificial
La Guardia Civil ha intervenido en la provincia de Huelva un total de 451 puños americanos equipados con un sistema eléctrico capaz de generar descargas de hasta 2.000 voltios, una potencia que puede provocar lesiones irreversibles en quienes la sufran. La actuación se enmarca dentro de los controles habituales que el cuerpo realiza sobre armas, explosivos y material prohibido, y se activó tras detectarse un envío sospechoso procedente de fuera de la Unión Europea. El cargamento, que simulaba contener artículos de defensa personal, se localizó en un almacén de San Juan del Puerto, donde los agentes procedieron a su incautación.
Según fuentes de la investigación, estos dispositivos combinaban la estructura de un puño americano metálico con un mecanismo eléctrico de alta tensión, lo que los convertía en un arma doblemente peligrosa: contundente y capaz de emitir una fuerte descarga. Su posesión y uso están estrictamente prohibidos en España por la legislación vigente sobre seguridad ciudadana. La Guardia Civil ha recordado que la fabricación, tenencia o venta de armas prohibidas puede conllevar sanciones económicas o incluso responsabilidades penales, dependiendo de la gravedad del caso. Los artículos intervenidos se destruirán una vez finalizado el proceso administrativo.
Con esta operación, el instituto armado refuerza su compromiso con la prevención del tráfico de armas ilegales y la protección de la ciudadanía frente a la entrada de materiales que, aunque puedan parecer de defensa, representan un riesgo serio para la integridad física de las personas y da pie a la aparición de situaciones violentas o a posibles amenazas a terceros.


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