Íñigo Vélez ya es historia del Recreativo de Huelva

Parecía que no, pero finalmente sí. Íñigo Vélez ya no es entrenador del Recre. La dura derrota contra el Real Madrid Castilla y el cambio a gritos que pedían los blanquiazules provocan que desde la nueva directiva tomen una decisión necesaria y desesperada al mismo tiempo para evitar que el descenso a Segunda Federación sea una realidad. Quedan cinco encuentros y el Decano está a tres puntos de la permanencia, por lo que el efecto del nuevo técnico debe ser total para revertir la dinámica.

El Decano lo comunica de la siguiente forma. «El Real Club Recreativo de Huelva informa que Íñigo Vélez ha sido cesado como entrenador del primer equipo. La entidad ha tomado esta decisión tras un proceso de valoración interna con el objetivo de afrontar con nuevas energías los próximos desafíos de la temporada. El Club agradece a Íñigo Vélez su compromiso, profesionalidad y esfuerzo durante el tiempo que ha estado al frente del equipo, y le desea lo mejor en sus futuros proyectos personales y profesionales».

Íñigo Vélez y los números de un desastre en el Recre

La historia de Íñigo Vélez en el Recreativo de Huelva es la de la incapacidad total. Cuando aterrizó en el Nuevo Colombino, el Recre era antepenúltimo y estaba a un punto de la permanencia. Hoy, quince partidos después, sigue siendo el tercero por la cola y está a cuatro de la salvación (tres más uno por el enfrentamiento directo perdido con el Yeclano Deportivo).

Más allá de los pésimos resultados (tres victorias, siete empates y cinco derrotas en quince encuentros), las sensaciones onubenses son de catástrofe. El equipo no transmitía absolutamente nada, la producción ofensiva es ineficiente, la aparición de sus teóricas figuras pesadas del vestuario inexistente y la fortaleza defensiva brilla por su ausencia, tal y como se pudo comprobar en el duelo del pasado fin de semana ante el Real Madrid Castilla. Víctor Muñoz y Gonzalo García, máximo goleador del Grupo 2 de Primera Federación, pusieron en jaque el entramado de la retaguardia onubense. Fueron la gota que colmó el vaso de paciencia de los mandamases, que ahora pondrán sobre la mesa un nuevo nombre para tratar de dar la vuelta a una situación delicada.

Raúl Galbarro se hará cargo del primer equipo y Manolo Toledano será el encargado del filial onubense.